Pechuga de pavo asada con miel y mostaza

Hoy vamos ya con una sugerencia para el segundo plato de estas fiestas: «Pechuga de pavo asada con miel y mostaza».

Yo soy más de pescado pero en casa tanto mis hijas como mi marido son de carne, así que suelo preparar más este tipo de recetas. En este caso a los cuatro nos encanta porque el pavo es una carne muy suave y con esta salsa queda perfecta.

La receta de la pechuga de pavo asada es sin Thermomix , pero es muy sencilla de preparar. Lo hemos acompañado de un arroz basmati con pasas y avellanas y con un toque de canela y nuez moscada, qué sí he preparo en la Thermomix; si no os gusta esta mezcla de sabores, con un arroz blanco, patatas fritas, patatas nuevas Hasselback o ensalada, estará perfecto.

¡Espero que os guste!

 

Pechuga de pavo asada con miel y mostaza, acompañada de arroz basmati con pasas y avellanas

 

  • Ingredientes: (para 6 raciones)

– 1.000 g. de pechuga de pavo en 1 pieza

– sal y pimienta

– 2-3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra

– 5 cucharadas de mostaza a la antigua

– 5 cucharadas de miel

– 300 g. de caldo de pollo

– 300 g. de nata para cocinar

– 1 cucharadita de harina fina de maíz (maizena)

 

* Para el arroz con pasas y avellanas:

– 350 g. de arroz basmati

– 700 g. de agua

– 1 cucharadita de sal

– 1 cucharada de aceite de oliva (opcional)

– 3 cucharadas de mantequilla

– 3 cucharadas de avellanas picadas

– 3-4 cucharadas de uvas pasas

– 1-2 pellizcos de canela molida

– 1-2 pellizcos de nuez moscada

 

  • Preparación:

1.- Pechuga de pavo asada:

Precalentamos el horno a 250º.

Atamos la pechuga de pavo con hilo de cocina (en muchas carnicerías os lo hacen ellos) y salpimentamos. La ponemos en una fuente refractaria.

La untamos bien con la mostaza antigua y regamos con un poco de aceite de oliva virgen extra.

Horneamos durante 15 minutos, a 250º.

Bajamos la temperatura del horno a 200º y horneamos durante 15-20 minutos más.

Sacamos la fuente del horno y pincelamos la pechuga con la miel (si no está líquida, la calentamos unos segundos en el microondas). Metemos de nuevo en el horno y horneamos 20 minutos más, a 200º. Retiramos.

Mientras se asa la pechuga de pavo, vamos preparando el arroz basmati.

 

2.- Arroz basmati con pasas y avellanas:

Colocamos un bol sobre la tapa del vaso de la Thermomix y pulsamos la función balanza. Echamos el arroz hasta que pese los 350 g. Cubrimos con agua y dejamos a remojo durante 20-30 minutos.

Volcamos en el cestillo o en un colador grande el arroz y lo aclaramos.

Vertemos el arroz en el vaso junto con los 700 g. de agua, la sal y el aceite o la mantequilla (opcionales) y programamos 7 minutos, temperatura varoma, giro a la izquierda y velocidad 1.

Sin quitar el cubilete ni la tapa del vaso, dejamos que repose dentro del vaso durante 10-12 minutos para que el arroz termine de absorber todo el líquido.

En una sartén ponemos a calentar la mantequilla. Cuando esté fundida, añadimos el arroz, las avellanas y las uvas pasas. Mezclamos y salteamos durante 2 minutos, sin dejar de remover.

Espolvoreamos la canela y la nuez moscada y mezclamos. Reservamos.

 

3.- Salsa para la pechuga de pavo:

A fuego medio-fuerte ponemos un cazo con el caldo de pollo y dejamos hasta que hierva.

Agregamos la nata, salpimentamos y mezclamos. Dejamos que reduzca, removiendo de vez en cuando, durante 10 minutos aprox.

Añadimos la salsa de mostaza y miel que nos ha quedado en la fuente donde tenemos la pechuga asada. Mezclamos y dejamos que hierva durante unos minutos.

En un vaso ponemos 2 cucharadas de agua fría y la maizena. Mezclamos bien hasta que la maizena se disuelva.

Lo incorporamos al cazo y revolvemos. Lo dejamos al fuego, removiendo de vez en cuando, hasta que la salsa espese un poquito (a nuestro gusto).

 

4.- Presentación:

En cada plato, ponemos un molde redondo humedecido con agua y echamos el arroz basmati, con avellanas y pasas. Presionamos con una cuchara y desmoldamos con cuidado.

Retiramos el hilo de cocina de la pechuga de pavo y volvemos a pincelar con los restos de mostaza que hayamos retirado al quitar la malla o hilo. Cortamos la carne en rodajas finas y las ponemos en los platos, regadas con la salsa bien caliente.

La salsa que nos sobre, la ponemos en una salsera y servimos inmediatamente.

 

* Fuente: revista Lecturas.

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