¡Me encanta el requesón!, sobre todo untado en una rebanada de pan tostado y con un trocito de membrillo encima. Es un lácteo que sale del suero de leche cuajado y tiene un alto aporte de las proteínas propias de la leche, calcio y pocas grasas (ésto último me encanta).
Se utiliza tanto para postres como en platos salados, sobre todo para rellenar pasta. Como postre, otra forma de tomarlo que me gusta mucho es con fruta fresca, como fresas, kiwi, …
Nunca lo había utilizado para hacer una tarta hasta que encontré esta receta. Siempre que me encuentro la palabra «quesada» en alguna receta me lanzo a por ella, ya que es uno de mis postre favoritos: «Quesada pasiega«. Pero esta vez en vez de ser típica de mi tierra, Cantabria, es de Galicia.
Esta tarta está riquísima, ¡nos ha encantado!. Os recomiendo no decorarla y según los gustos de nuestros comensales la podemos acompañar de distintas cosas como por ejemplo: miel, yogur o mermelada, aunque sóla también está riquísima.
¡Espero que os guste!.