¿Os gusta nuestra comida de ayer? ¡a nosotros nos encanta! De primero puse una crema de calabaza (dentro de poco pondré la receta en el blog) y de segundo, este riquísimo pollo asado en bolsa, con pimiento rojo, zanahorias y unos dientes de ajo. Es una receta sin Thermomix, pero aunque este blog sea principalmente de recetas hechas con la Thermomix, también quiero compartir esas recetas que hago sin ella y que más me gustan.
Recuerdo que de pequeñas, mi madre nos hacía, casi todos los fines de semana, pollo asado con patatas fritas. ¡Qué rico la salía!. A mi hermana y a mí nos encantaba y recuerdo que mojábamos muchísimo pan en la salsa y a veces nos regañaban por comer tanto.
Ahora, yo también tengo dos niñas preciosas y también hacemos el pollo asado muy a menudo. Lo que ha cambiado es la forma, ya que desde que descubrí las «bolsas para asar», siempre lo hago de este modo. Lo más importante es que el pollo se asa en su propio jugo y aunque a mí me gusta untarle con un poco de aceite y echar ½ vasito de vino blanco, no es necesario. Queda muy sabroso, las verduras guardan todas sus vitaminas y no engorda. Además de ésto, me gusta lo limpio que es, ya que no manchamos nada el horno. Una de las cosas por las que me daba pereza hacerlo antes, era porque después siempre tenía que limpiar bien el horno y me daba bastante pereza. Ahora eso lo evito, ya que al hacerse dentro de la bolsa no salpica, ni mancha nada.
Aquí os dejo cómo lo hago yo, ¡espero que os guste!