¡Qué ricos están los crêpes! A mi hija mayor la encantan, tanto los crêpes como las tortitas y los suelo hacer algún sábado que otro, sobre todo en invierno que hace malo y por la tarde ya no nos apetece salir.
A ellas las gustan rellenos de crema de cacao y a mí me encantan con fruta y nata o mermelada y con dulce de leche. Cuando los hacemos salados nos gustan muchísimo con jamón york y queso (colocamos un par de lonchas de queso sobre la crêpe recién sacada de la sartén para que se funda y encima el jamón, enrollamos y ¡a disfrutar!) o con ensalada (por ejemplo: canónigos, queso de cabra, nueces, tomate cherry, trocitos de manzana y aliñada con vinagre de módena).
Si los vamos a hacer dulces, tenemos que espolvorear azúcar por encima según los sacamos de la sartén y antes poner el siguiente encima.
Yo tengo una sartén especial para crêpes de 20 cm. de diámetro y con estas cantidades me salen 13 unidades. La cantidad de masa que hay que echar es justo lo necesario para cubrir el fondo de la sartén. En función del tamaño de ésta, nos saldrán más o menos crêpes.
¡Espero que os gusten!