Este riquísimo postre lo he descubierto gracias a mi hermana. Ella trabaja en Reinosa (Cantabria) y los días que se tiene que quedar a comer para luego continuar trabajando, suele ir junto con sus compañeras al restaurante «La Cantinuca del Ebro», en Fontibre.
Fontibre es un pueblo precioso donde nace el río Ebro, la verdad es que hace muchos años que no voy y me gustaría mucho volver, sobre todo, para enseñárselo a mis niñas. En este pueblo está este restaurante de comida casera, donde según me cuenta mi hermana está todo riquísimo.
Hace un par de semanas, me llamó por la tarde y me dijo: «Ele, tienes que hacer el postre que hemos tomado hoy, el dueño nos sugirió que pidiésemos el postre de fresas con yogur y cuando nos trajo las copas y los probamos, ¡ummm, buenísimo! y además, es muy sencillo». Pues dicho y hecho, en cuanto me dijo en qué consistía ya me imaginé que nos iba a encantar y ese fin de semana lo hice: ¡éxito total!.
La mezcla de las 3 capas es perfecta, yo lo he hecho con yogures griegos normales, no azucarados, porque al unirlo todo con la leche condensada queda suficientemente dulce.
¡Espero que os guste!.